martes, 7 de enero de 2020

Comentario editorial del 05-01-2020

COMETARIO EDITORIAL DEL 05-01-2020

 

La semana: hemos tenido noticias de todo tipo, pero principalmente, lo que más acaparó la información han sido los acuerdos que llegó el PSOE para formar gobierno, acuerdos con los partidos independentistas, partidos cuyo único objetivo es romper la unidad de España.

 

Realmente creo que estamos ante un error histórico cuyas consecuencias pueden acabar con el régimen de libertades de 1978, testigo de una de las mejores épocas de España en toda su historia y que, en las presentes circunstancias, sólo podría ser sustituido por algo infinitamente peor. Y el primer responsable es el macarra de Pedro Sánchez, que algún día acabará pagando por sus desmanes ante la Justicia o ante la historia, aunque probablemente ante ambas. Pero, desde luego, no es el único: el PSOE en pleno cargará con la culpa, bien por cobardía, bien por una paradójica y tóxica mezcla de sectarismo y falta de convicciones que le ha llevado a deslizarse, primero con Zapatero y después con Sánchez, por una pendiente que le ha llevado a la situación actual, en la que sin ningún tipo de vergüenza pacta el Gobierno de España con los peores enemigos de la Nación, comunistas bolivarianos, proetarras y golpistas catalanes en ejercicio.

 

Pero no se lo pierdan, como dirían los madrileños, en esta hora trascendental para la Nación, los barones socialistas mantienen un silencio sepulcral e indecente que sólo rompen para criticar al PP y a Ciudadanos, lo que demuestra que a ellos España les importa lo mismo que a un Rufián cualquiera. Aunque a decir verdad tampoco cabe poner el foco en estos indeseables, todos los que forman parte de la voraz maquinaria socialista, así como lo que han apostado por Sánchez en las urnas teniendo sobradas pruebas de la catadura del personaje, tienen una responsabilidad moral tremenda en innegable en esta felonía y en la que puedan incurrir a partir de ahora. Sánchez, solo, no es nadie. Sánchez, sólo, no podría consumar su traición.

 

García MOLINA


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