Comentario editorial del 10-04-16

COMENTARIO EDITORIAL DEL 10-04-16

La semana: Como siempre hemos tenido de todo un poco, aunque han sido dos cuestiones lo que acaparó la información  de los últimos siete días, la reunión a tres para un posible pacto de gobierno, cuyo resultado fue de lo más nefasto. La verdad que yo no acabo de entender ese afán de Pedro Sánchez de llegar a la Moncloa como sea, Sánchez no se merece estar es ese puesto, porque esta anteponiendo su interés personal al del país, pero es que Rivera  debería de haber tenido algo más de sensatez, y haber cortado por lo sano, viendo que estaban haciendo el ridículo, y perdiendo el tiempo, y no solo eso, las malas consecuencias que eso conlleva, para España y los Españoles. Por lo tanto y entrando dentro de la sensatez, pedimos nuevas elecciones, que decidamos los ciudadanos que queremos para este país y sobre todo acertemos a la hora de volver a votar y no guiarnos de falsa promesas que nadie va poder realizar, eso sí en todo este periodo de sequía de gobierno, la economía española esta endeudándose cada minuto.

Por otro lado esta semana hemos tenido noticias contrastadas de un buen número de españoles que saca su dinero del país de forma fraudulenta. Conviene aclarar que uno puede tener su dinero en el país que quiera, pero tiene que declararlo a la Hacienda Pública, bueno pues los que tienen dinero en España eso no sucede, y al no declarar esa salida se convierten en defraudadores. ¿Quiénes son los defraudadores? Pues son los  que  Militan en el igualitarismo, propugnan el reparto equitativo y denuncian el IVA cultural pero disfrazan el suyo personal. Claman contra los bancos o contra los  especuladores. Braman contra las hipotecas que jamás necesita el que paga al contado y coleccionan viviendas vacías al tiempo que denuncian desahucios.  Gritan contra la Sanidad y la Educación privadas pero reservan habitaciones en varios hospitales a la vez por si hay que parir, hospitales privados se entiende.  Estos que van a Panamá pero tienen subvención de la  patria.

Sean políticos, periodistas, artistas, escritores, directores, empresarios o actores, era a ellos a los que les parecía mal la ingeniería financiera porque Hacienda éramos todos. Eran ellos los que no distinguían entre el político que roba a su pueblo y el ciudadano que trataba de pagar la menor cantidad de impuestos posible. Ahora, cuando la pasta viene de Venezuela o va a los paraísos quizá convenga matizar entre lo ganado y lo robado. Antaño se aprovechaban ruedas de prensa "culturales" para denunciar supuestos golpes de Estado encubiertos – recuerde cuando Almodovar dijo que Aznar quería dar un golpe de Estado- pero ahora se suspenden esas ruedas de prensa porque algunos periodistas, curiosos ellos, van a preguntar cosas ajenas a la razón de la convocatoria. Y es que el marxismo es una corriente del capitalismo que gana dinero negándolo. Era tan fácil en otro siglo ver marqueses arruinados dando chocolate al loro como hoy ver  marxistas millonarios luciendo andrajos de diseño. Siempre fue así. El marxista es la élite. Son los ricos de izquierdas. No hacía falta Panamá para saberlo aunque lo recordó y lo  matizó.

García MOLINA